TRAS AÑO Y MEDIO, LA ALCALDESA SOLANAS ACEPTA LAS DIMISIONES DE CUATRO CONCEJALES Y NOMBRA NUEVO TENIENTE DE ALCALDE.
5 de julio de 2013.
Casi un año y medio después, la alcaldesa Teresa Solanas ha decidido
reconocer y formalizar las dimisiones de los cuatro concejales (dos del PP y
dos de CHA) producidas en enero de 2012.
A su vez, la alcaldesa hace efectivo el nombramiento de Jesús Sala-Gómez
como teniente de alcalde y, por tanto, alcalde en funciones mientras la
alcaldesa disfrute de sus merecidas vacaciones veraniegas y, este año sí, el
Ayuntamiento sanmateano siga debidamente constituido y sin alcaldesa
secretamente ausente, tal y como sucedió el pasado verano de 2012.
El nombramiento del concejal de urbanismo como nuevo teniente de alcalde no
nos coge por sorpresa. Es algo que tenía que suceder tarde o temprano, si la
alcaldesa quería evitar que se repitiese el bochornoso capítulo sucedido en el
pleno ordinario de septiembre de 2012, cuando concejales socialistas le
preguntaron si los días de ausencia de la propia alcaldesa, que no fueron
notificados convenientemente, y que dejaron al pueblo sin alcalde en funciones,
se debían a que se había ido de vacaciones. Ella lo negó. Contestó que sólo
había ido a dar una vuelta por unos asuntos. Pero su intenso bronceado de playa
no dejaba lugar a dudas.
Pero hay un aspecto del nombramiento del nuevo teniente de alcalde que
nos llama poderosamente la atención a muchos vecinos sanmateanos.
En julio de 2011, significados socialistas locales, urdieron una
calumnia acusando incluso en medio público al portavoz popular y a su esposa de
haber intentado robar comida en el Mercadona de Villanueva de Gállego. El asunto se puede recordar en este link.
La alcaldesa
Solanas, estrenando cargo y estrategia de siembra de insidias entre los concejales del equipo de gobierno, llegó a sugerir, el mismo día del
lanzamiento socialista de la calumnia por tiendas, bares y calles de San
Mateo, que Edmundo Núñez, el teniente de alcalde acusado falsamente por los socialistas, debería dimitir.
Si embargo, en
la actualidad, Solanas no vacila en nombrar teniente de alcalde al único concejal de su
equipo de gobierno, imputado y a la espera de juicio oral junto a su esposa,
por acusaciones de estafa continuada y falsedad en documento mercantil y que, muy posiblemente, tengan que hacer frente a una querella por injurias y calumnias por causa de sus continuadas acusaciones contra Edmundo Núñez. Parece
que a la señora alcaldesa le importa más, en estos momentos, poder ir de
vacaciones sin que la abochornen a su vuelta, antes que hacer realidad su
propio lema “legalidad y transparencia” que repetía hasta el aburrimiento hace
dos años. Legalidad y transparencia puestas continuamente en entredicho por la insistencia de la alcaldesa Solanas en mantener al concejal imputado en las comisiones de urbanismo, para alejar de este modo a Núñez de las deliberaciones de dicha comisión como representante y portavoz del Grupo Popular.
Durante estos dos años Teresa Solanas no ha demostrado apenas otra cosa que manifiesta incapacidad para trabajar con quienes fueron su equipo de gobierno y le dieron su apoyo.
Ha gobernado sin tratar de constituir un nuevo equipo de gobierno y amparándose en la infantil excusa de que "su equipo con los trabajadores del ayuntamiento".
Ha perjudicado al municipio con sus decisiones.
Se ha servido personalmente de la Fundación San Mateo, siendo contratada por una de las empresas proveedoras de la fundación de la que Solanas ostenta la presidencia. Contratación de la que tenemos prueba documental.
Su gestión ha acumulado quejas de particulares y colectivos a discreción.
Ha mostrado su verdadero talante al prohibir derechos constitucionales al público asistente a los plenos, y por extensión a todos los sanmateanos.
Mediante un curioso procedimiento de adjudicación, favoreció a su amigo y miembro de la lista electoral del PAR con la adjudicación de un servicio público durante años...
Ha dado por buenas y ha recepcionado las vergonzosas, escandalosas, deficientes y exageradamente caras obras del barrio de El Saso, las cuales aún se hayan bajo sospecha y con un recurso pendiente, presentado a la Audiencia Provincial de Zaragoza..., Barrio de El Saso al que ella dijo defender en su programa electoral.
En conclusión, consideramos que el Ayuntamiento debería trabajar por el bien común de sus ciudadanos, antes que buscar el beneficio personal de unos pocos. Esta nueva actuación de la alcaldesa, unida a otros episodios como su gestión al frente de la Fundación San Mateo, nos parece inmoral, falta total de ética, y una burla al conjunto de los sanmateanos.
Abiertamente, pedimos públicamente la dimisión de Teresa Solanas como alcaldesa.